En la historia de la sabiduría ancestral, se encuentra el animismo, una creencia tan antigua como el tiempo mismo. No se trata de una filosofía o una religión; es una verdad viviente que nos susurra a través de las hojas de los antiguos árboles y vibra en las piedras más antiguas. Cómo practicante espiritual de las ciencias ocultas, quiero invitarte a un viaje a través del velo del animismo, donde cada ser, cada objeto, cada espacio es un espejo del espíritu universal.
¿Qué es el Animismo?
En pocas palabras el animismo es la creencia de que todo en el universo posee un espíritu, una chispa de lo divino. Es una forma de vivir y percibir el mundo. Desde la piedra más pequeña, hasta la montaña más imponente, todo está imbuido de una esencia espiritual que merece nuestro reconocimiento y respeto.
La práctica del animismo se hunde en las raíces de nuestra existencia. Fue la primera forma en que nuestros ancestros entendieron el mundo que les rodeaba, un mundo donde cada elemento de la naturaleza tenía su propio carácter y significado. Esta perspectiva animista de ver el mundo, es la base sobre la cual se construyeron muchas de las religiones y practicas esotéricas actuales.
Características Principales del Animismo.
1 – Todo esta Vivo: En el animismo, cada objeto, cada criatura, cada lugar tiene su propio espíritu. Es la forma base de nuestra conexión y comunicación con el mundo que nos rodea.
2 – Respeto y Reverencia a la Naturaleza: La naturaleza no es vista como un recurso a explotar, sino como un templo sagrado lleno de sabiduría y poder.
3 – Rituales y Ceremonias: Los rituales de animismo sirven para honrar, comunicarse y crear una relación con los espíritus de todo lo que existe.
El Animismo en la Práctica.
Como buscadores espirituales, debemos ver el animismo como más que una creencia, debemos adoptarla como una práctica viviente. La Magia que practicamos en Evil Magik, se basa en la comunicación y el respeto mutuo con los espíritus que nos rodean. Hacer esto nos permitirá acceder a sabidurías antiguas y poderes ocultos, sincronizándonos en armonía con el mundo espiritual y físico.
En mi práctica personal, cada objeto que me rodea, desde mis candelabros, hasta mis mazos de cartas, son tratados con un profundo respeto. No son meros instrumentos; son mis compañeros y aliados en mi camino mágico. Cada uno de ellos tiene su propia historia, su propia energía. Al cuidarlos, al hablarles, al tomar en cuenta incluso su personalidad, fortalezco mi relación con ellos, creando una sinergia más pura al trabajar mi magia.
Uno de los aspectos más fascinantes de mi práctica es la interacción con mis cartas de adivinación (Tarots y Oráculos). No las veo como simples cartas de papel, no señor, cada mazo es una entidad llena de personalidad y sabiduría. Al hablar con ellas, al entrevistarlas, logro descubrir rasgos de su personalidad, de sus fortalezas, sus debilidades, su disposición a trabajar, etc. Y conociendo su esencia nata, me es posible lograr lecturas más precisas y más en sintonía con cada consultante que recurre a mí.
Por ejemplo: Tengo un mazo Lenormand que, ah como es pesimista y negativo, siempre que lo consulto me da los mensajes más deprimentes y derrotistas. Así que realmente casi nunca trabajo con él, pero lo conservo con mucho cariño porque no lo juzgo, así es el y le tengo mucho cariño. Tengo un mazo de Tarot que nunca me sirve en lecturas personales (a mi mismo) siempre sale confuso y se niega a contestar, pero le encanta y es muy bueno con otras personas. Tengo otro que es todo lo contrario, conmigo es una maravilla, una verdadera ventana a mi futuro, pero no le gusta trabajar con otros. Ejemplos e historias puedo tener miles, unos son inseguros, otros bien ególatras, algunos traviesos, algunos muy fríos y directos, etc.
El animismo nos es muy útil al crear espacios sagrados. Cada espacio, cada objeto en mi altar esta imbuido con animismo. Cada espacio es un santuario para los espíritus que lo habitan. Al reconocerlos, respetarlos y cuidarlos, sé que ellos harán lo mismo por mí. Formando así un vínculo profundo que empodera mi magia. Por eso es importante convertirlos en aliados en nuestro camino espiritual.
La Magia de las Pequeñas Cosas.
En el animismo aprendemos a ver lo sagrado en lo cotidiano. Al preparar una comida, al regar las plantas, incluso al realizar tareas mundanas como barrer la casa, tenemos la oportunidad de conectar con los espíritus presentes. Esta practica transforma todo lo ordinario en un acto mágico, lleno de significado y poder.
El animismo es una verdad esencial en nuestra práctica de las ciencias ocultas. Nos alienta a ver más allá de los físico, a reconocer la presencia y el poder de los espíritus en todo lo que nos rodea. Como Brujo, afirmo que el animismo no es solo una creencia, sino una realidad viva. Al honrar a los espíritus de todo lo existente, nos conectamos más profundamente con el universo, y con nosotros mismos.
Espero que hayas disfrutado este artículo y que te decidas a adoptar el animismo. Podría contarte mil historias, tanto divertidas como tenebrosas con diferentes objetos. No esperes que solo por decirle hola a tu cuarzo, se conviertan en íntimos amigos, requiere tiempo y constancia formar vínculos profundos, además los objetos son tímidos, les tomará tiempo tenerte la confianza para expresarse. Pero mientras lo hagas desde un corazón sincero, y con cariño, te prometo que notarás la diferencia.
¡Saludos y hasta la próxima!
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